Las brumas de almohada son productos elaborados a base de aceites esenciales aromáticos y relajantes diseñados para rociar en la almohada antes de acostarse.
Los aceites esenciales en las brumas de almohada, como la lavanda y mandarina, son conocidas por tener propiedades relajantes que ayudan a reducir el estrés, promover la relajación, conciliar el sueño y mejorar la calidad del mismo.
El simple acto de rociar la bruma en la almohada puede convertirse en un ritual relajante que señala al cuerpo y la mente que es hora de descansar.